sábado, 7 de mayo de 2016

DERECHOS HUMANOS Y EDUCACIÓN

Debemos ser conscientes del derecho a la educación como derecho humano que debe ser llevado a cabo en la escuela. La educación es uno de los pilares fundamentales para el desarrollo tanto personal como social de una persona por lo que no se debería privar a nadie de tal derecho.

En el artículo 5 de la Declaración Universal sobre la diversidad cultural de la UNESCO encontramos la siguiente afirmación: "Toda persona tiene derecho a una educación y una formación de calidad que respete plenamente su identidad cultural". Por tanto, encontramos que se establece el derecho a una educación de calidad que respete la individualidad de cada persona. Además, en la Declaración Universal de los Derechos Humanos (1948) encontramos importantes factores como que el objeto de la educación sea el pleno desarrollo de la personalidad humana y el fortalecimiento del respeto a los derechos humanos y a las libertades fundamentales; además del derecho de los padres a escoger el tipo de educación que recibirán sus hijos.

Ser docente implica que debemos conocer, enseñar y promover derechos humanos en la escuela. Debemos conocerlos para poder enseñarlos, hacer saber a nuestros alumnos de su existencia y de la importancia que tienen, consiguiendo así su fomento. Si no conocen estos derechos, ¿cómo van a defenderos?

La educación en derechos humanos, junto con la educación para la democracia y la educación para el respeto y entendimiento mutuo, es vital para nuestra sociedad. Promueve la equidad, el "empoderamiento" y la participación, así la prevención y resolución de conflictos. En definitiva, implica desarrollar sociedades en las que los derechos humanos de todos son respetados, protegidos y realizados.

Por tanto, debemos apostar por la educación de calidad ya que es el mejor método para cumplir el resto de los objetivos que podamos tener. Sin embargo, a nivel universal es algo que estamos lejos de alcanzar a pesar de los avances conocidos en este campo durante la última década en muchos países pobres pues las precariedades materiales y las carencias en la formación de sus docentes limitan la utilidad de la enseñanza.  (Alfred Fernández, 2014).

Tal como afirmó la ONU debemos considerar un problema la implantación de un sistema educativo que no esté pasado en la calidad, pues si la educación ya es importante por sí misma su calidad lo será aún más. Y cuando hablamos de calidad no solo nos referimos a los resultados académicos adquiridos, sino también incluye los derechos humanos y la preparación para un empleo contribuyendo así al desarrollo de la personalidad de los alumnos.

Asimismo, en algunos países desarrollados, a pesar de su capital no invierte lo suficiente en educación, por lo que nos encontramos ante un problema, pues no se da la importancia necesaria o al menos no se le permite un desarrollo de calidad a uno de los pilares más importantes de la sociedad como es la educación. Y para hacer frente a ello se necesitan gobiernos que tengan como objetivos mejorar la calidad educativa. (Andrés García De La Riva, 2014).

Por otra parte, sabemos que la educación hoy en día tiene conciencia de los avances tecnológicos, las legislaciones y marcos políticos. Sin embargo, esto no basta, pues deben tenerse también en cuenta los cambios de mentalidad, de valores y el fortalecimiento de la visión transformadora de los individuos. Para ello, el programa mundial de los Derechos Humanos hace referencia de nuevo a la implantación de metodologías que se basen en la experiencia, que conecten la realidad educativa y la social, además de favorecer la educación en derechos humanos y la aplicación de estos conocimientos en la vida.

La UNESCO ha desarrollado un plan de acción teórico-práctico en torno a la educación para el Desarrollo Sostenible, donde se configuran nuevas metodologías pedagógicas y docentes para el progreso de los conocimientos académicos, las competencias cognitivas y el desarrollo de competencias para el ejercicio de una ciudadanía activa y la educación en derechos humanos. (N. Caparrós y D. Carbonero, 2014).

Todo ello es necesario, pero debemos ser conscientes de que en las aulas quienes trabajan con los maestros con sus alumnos, por lo que como futuros docentes debemos ser conocedores de lo que significa el derecho a la educación y de lo que implica su ejecución para poder trabajar así los derechos humanos con nuestros alumnos además de conseguir una educación de calidad.


Fuentes: Power Point de María del Carmen Sánchez Pérez, profesora del departamento de Sociología en la facultad de Educación de Albacete. UCLM.; Artículo Educación: derecho de la persona, obligación de los Estados (El País); Artículo "La enseñanza primaria universal no es suficiente. Y ni si quiera se cumple" (El País), Andrés García De La Riva; Artículo "Educación al servicio de la comunidad (Tribuna), N. Caparrós y D. Carbonero.

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