POLÍTICA EDUCATIVA

Como ya hemos visto la educación es uno de los pilares más importantes en la sociedad además de un derecho humano, por lo que para su desarrollo existen políticas educativas. En España encontramos diferentes leyes educativas que han ido cambiando a lo largo de los años:

• LGE, 1970.
• LODE, 1985.
• LOGSE, 1990.
• LOPEG, 1995.
• LOCE, 2002.
• LOE, 2006.
• LOMCE, 2013.

Si analizamos la frecuencia con la que es cambiada la ley educativa encontramos períodos de tiempo muy cortos, en unos pocos años es modificada cuando aún no se ha podido producir una correcta y completa adaptación a la anterior. Cambiar una ley educativa implica realizar grandes cambios que afectan a un amplio número de personas, es una situación complicada y si ésta se da con tanta frecuencia la calidad de la educación podría quedar cuestionada. ¿A qué se deben tantos cambios? En parte a los cambios de gobierno, pues cada partido político pretende que se fomente lo que ellos defienden en las aulas modificando la ley educativa a su gusto. 

Deberían darse cuenta de que la educación es algo aparte de sus ideas, algo que debe servir para que los alumnos lleven a cabo un desarrollo personal que le haga tener sus propias ideas además de los conocimientos sobre las distintas áreas impartidas. Por tanto, lo ideal sería que se elaborara una ley educativa de acuerdo común entre los distintos partidos políticos de modo que no sea modificada cada vez que cambiáramos de gobierno, siempre y cuando dicha ley sea útil y eficaz.

En España no solo nos encontramos con este problema en Educación, sino también nos enfrentamos a una grave crisis que lleva años afectándonos. Ha presentado un impacto sobre:

•  Los recursos humanos (aumento de ratios, modificación del régimen de sustitución, eliminación de la obligatoriedad de que los centros de bachillerato deban ofrecer al menos dos modalidades, modificación de la jornada lectiva del profesorado, contención salarial). 

• Recursos educativos, materiales y financieros (gastos de limpieza, mantenimiento y conservación de inmuebles, limitaciones al consumo energético y renegociación de servicios contratados; reorganización del transporte escolar; reducción del gasto en libros, material de oficina, suscripciones a revistas en actos culturales y deportivos, del programa de gratuidad de libros de texto y aumento del IVA en libros y cultura; impacto en becas y ayudas al estudio).

(Calero, 2013.: 12-13)

Si analizamos estos datos encontramos la cantidad de dificultades que supone esta situación de crisis a la educación, sobre todo cuando los recortes le afectan en gran medida, un gran error pues como hemos dicho es un pilar fundamental en la sociedad.

Fuentes: Power Point de María del Carmen Sánchez Pérez, profesora del departamento de Sociología en la facultad de Educación de Albacete. UCLM; Calero, J. y Choi, A. (2013): Educación y políticas educativas en el Estado de las Autonomías.